Una historia divertida con personajes sencillos que incluye astutos consejos para vivir mejor con las preocupaciones de la vida cotidiana. Los acosadores son personas que atacan a los que son más pequeños o débiles que ellos para robarles o para obligarlos a hacer lo que quieren. Se interesan sobre todo por objetos, prendas de ropa y dinero. El acoso está prohibido y es castigado en las instituciones educativas. Los acosadores utilizan un método muy particular: provocar miedo. Amenazan a su víctima, le hacen chantaje... ¿por qué? Porque el miedo es una emoción que nos vuelve sumisos. Hace que seamos incapaces de reflexionar: lo único que podemos hacer es obedecer. La víctima se siente débil y pierde enseguida la confianza en sí misma. Puede incluso sentirse culpable: suele creer que todo lo que le pasa es su culpa. Sin embargo, en realidad no es su culpa en absoluto. Los únicos que tienen la culpa son los acosadores. Nadie más. Si sufres acoso, seguramente tienes mucho miedo de que te golpeen, te roben o te insulten... y estás convencido de que no puedes hacer nada al respecto. Es normal. Pero, en realidad, tienes una manera para escapar: contárselo a un adulto de confianza, como tus padres o tu profesor.
