Querido Blaz: Te cuento que estoy bien, aunque hace unos días tuve que huir. Tocaron el timbre muy temprano y me asusté, seguro iban por mí, así que salí corriendo, tomé un tren y ni te imaginas dónde estoy ahora (bueno, la postal y el timbre lo dicen). Estoy conociendo nuevos lugares, ¡por fin! también conocí a un chico muy lindo en el camino, y estamos viajando juntos... Lo bueno es que me traje mis ahorros, pero tendré que conseguir algo para ganar dinero pronto. Te vuelvo a escribir cuando llegue a otra ciudad. Con cariño, Luna