Cada vez que se mencionan las grandes inquietudes de nuestro tiempo (el racismo, la intolerancia, la violencia, el abuso de drogas, etc.) se llega a la misma conclusión: son temas que deben afrontarse desde la escuela. Pero también sabemos que en casi todos los países se habla de crisis de la educación y reina el desconcierto entre los profesores, los padres y los propios alumnos. Parece oportuno pues plantearnos algunas cuestiones esenciales: ¿qué es la educación?, ¿qué esperamos de ella?, ¿consiste en la mera transmisión de conocimientos o debe formar para la ciudadanía democrática?